Si alguna vez trabajaste en restaurantes o lugares donde la propina es gran parte de tu sueldo, seguramente recuerdas alguna ocasión en la que un cliente fue muy generoso con su agradecimiento por el servicio. Son esos momentos que nos hacen recuperar la fe en la humanidad, pero no siempre hay que confiarnos, pues un buen acto siempre se puede estropear.
Algo así pasó en el restaurante Alfredo’s Pizza Cafe, si te suena el nombre, es porque este lugar es famoso por su aparición en la famosa serie The Office. El establecimiento es real y, recientemente, se vieron envueltos en una situación problemática, pues decidieron demandar a un consumidor que dejó una propina de tres mil dólares pero que luego pidió de regreso.
Todo comenzó el pasado mes de junio, cuando Eric Smith decidió detenerse a comer algo en el lugar. Su consumo fue realmente módico, pagando apenas 13 dólares. Sin embargo, sorprendentemente, el hombre hizo su acción del día, dejando la cuantiosa propina de tres mil dólares a la mesera Mariana Lambert, esta acción fue parte de una tendencia en redes sociales, llamada tips for Jesus.
No hace falta decir que Mariana estaba sumamente agradecida por el acto, con la emoción a flor de piel, la joven dijo:
Realmente tocó mi corazón. Todavía no puedo creerlo. Sigo en estado de ‘shock’.
Pero la alegría duró muy poco, pues Eric decidió que quería el dinero de regreso, a pesar de que el gerente, Zachary Jacobson, ya se lo había entregado a la trabajadora. Todos en el restaurante quisieron creer que era un malentendido, por lo que Jacobson lo contactó por Facebook, pero no recibió una respuesta positiva y, lamentablemente, perdieron el dinero.
Pero la historia no terminó ahí, pues Alfredo’s Pizza Cafe decidió hacer justicia demandando a Eric Smith. Y de verdad esperamos que logren ganar la demanda.
Tuvimos que presentar cargos a través de la oficina del magistrado porque nos quedamos sin ese dinero. Él nos dijo que demandáramos, así que eso es lo que vamos a terminar haciendo… Espero que reconozca sus acciones, se presente y pague, porque no debió hacer esto.