La diversión convertida en desgracia es lo que experimentó una chica de Inglaterra llamada Kerry Donaldson, de 25 años, después de sufrir graves problemas en la columna vertebral que le impiden caminar luego de desarrollar una adicción al óxido nitroso, conocido como el “gas de la risa”.
A raíz de la condición de Kerry, expertos han difundido los peligros potenciales del uso recreativo del óxido nitroso, un gas compuesto químico que generalmente se usa para medicamentos anestésicos.
Sin embargo, este gas también se usa de forma recreativa y se puede consumir desde objetos como globos o directamente del cilindro. Además, a menudo se encuentra en los envases de la crema batida.
Por su parte, la propia Kerry busca crear conciencia compartiendo su historia y documentando su día a día a través de redes sociales en un intento por lograr que nadie más experimente su situación actual.
En entrevista para el diario británico The Times, la joven, que antes del devastador diagnóstico trabajaba como recepcionista, contó que comenzó a inhalar globos con óxido nitroso a los 18 años y aumentó su consumo a los 20, consumiendo un promedio de 600 envases en una semana.
Empecé a usar óxido nitroso hace aproximadamente cuatro o cinco años. Lo hacía de vez en cuando, generalmente los fines de semana. Estaba de moda, todo el mundo lo estaba haciendo.
La chica no se imaginaba que una mañana despertaría para descubrir que no podía ponerse de pie mientras experimentaba un hormigueo en las extremidades. Después de acudir al hospital, los médicos le informaron que su condición se debía a un daño en los nervios causado por el óxido nitroso.
Por ello le prescribieron inyecciones de vitamina B12 para ayudar a reparar su sistema nervioso. Sin embargo, poco después, a pesar de ser consciente del daño provocado por el “gas de la risa”, Kerry hizo caso omiso a las indicaciones de los médicos y continuó inhalándolo en grandes cantidades.
No mucho después de eso, comencé a perder la sensibilidad en mis piernas y manos. Fui al hospital y fui muy honesta con los médicos sobre el uso de óxido nitroso. Mis niveles de vitamina B12 eran bajos.
En enero de 2022, Kerry fue hospitalizada y recibió la noticia “deprimente” de que su hábito le había provocado un bulto en el disco en la parte inferior de la columna, dejándola incapaz de caminar.
Entiendo que fue mi culpa. No sabía que llegaría a este punto. Realmente no entendía el daño que podría causar. Solo pensé que era un poco divertido, no pensé que me haría daño. Yo no tenía educación en el tema.
Tras el diagnóstico y el deterioro de su salud, la joven pasa sus días postrada en una silla de ruedas y depende de su familia para recibir atención las 24 horas.
¿Qué dicen los expertos?
Expertos informan que existe un vínculo entre el abuso crónico de óxido nitroso y la mielopatía o el daño de la médula espinal debido a una deficiencia de vitamina B12, que puede provocar debilidad y desgaste muscular.
En entrevista para Cosmopolitan UK, Roz Gittins, directora de Farmacia de Humankind, una organización benéfica que ofrece servicios de apoyo a las drogas y el alcohol, habló sobre los efectos secundarios poco conocidos del consumo de óxido nitroso.
Cuando las personas toman óxido nitroso pueden sentirse relajadas y tranquilas. Además, pueden experimentar euforia y ataques de risa, por eso se le llama el ‘gas de la risa’. Sin embargo, estos efectos no duran mucho, por lo que las personas pueden usarlo con más frecuencia para sentirse de esta manera y, a veces, pueden volverse adictas a él.
Los efectos secundarios negativos de la inhalación recreativa de óxido nitroso también incluyen una sensación de mareo, lo que puede provocar caídas, dolores de cabeza y, en casos extremos, alucinaciones.
Además, puede provocar daño a los pulmones y la garganta, presión arterial baja, ataques cardíacos, desmayos y daño a los nervios. Finalmente, cuando se consume a largo plazo, el gas de la risa incrementa el riesgo de depresión y pérdida de memoria.