Según información de The Guardian, está previsto que el anticonceptivo oral de emergencia, conocido comúnmente como píldora del día siguiente, se apruebe en Japón a finales de este año. Sin embargo, previo a su prescripción médica, las mujeres podrían verse obligadas a solicitar el consentimiento de su pareja.
La regulación para respaldar las píldoras del día siguiente está avanzando en el parlamento de Japón después de que la organización farmacéutica británica Line Pharma International solicitó el año pasado mostrar una combinación de dos medicamentos para las motivaciones detrás de la interrupción temprana.
Con esta nueva medida, Japón se uniría a países que legalizaron la píldora de emergencia como Australia, Argentina, Reino Unido y Suiza. Sin embargo, el proyecto de ley ha sido criticado por grupos de derechos de las mujeres por condicionar su acceso al consentimiento de la pareja.
La iniciativa de ley derivada de la Ley de Protección Materna de Japón de 1948, que requiere el consentimiento de la pareja para los abortos quirúrgicos con muy pocas excepciones, es una política que, según activistas, “pisotea” los derechos reproductivos de las mujeres.
Según Bloomberg, Yasuhiro Hashimoto, un alto funcionario del Ministerio de Salud en Japón, justificó la medida ante un comité parlamentario a principios de este mes:
En principio, creemos que el consentimiento del cónyuge es necesario, incluso si un aborto es inducido por un medicamento oral.
Por otro lado, la abogada Mizuho Fukushima, miembro del partido opositor Socialdemócrata, criticó la posición del Ministerio de Salud:
¿Por qué una mujer debería necesitar la aprobación de su pareja? Es su cuerpo. Las mujeres no son propiedad de los hombres. Sus derechos, no los del hombre, deben ser protegidos.
Según The Guardian, la política actual ha tenido consecuencias trágicas, con una mujer de 21 años arrestada después de que su bebé recién nacido fuera encontrado muerto en un parque en el centro de Tokio. La mujer declaró ante la corte que le habían negado un aborto porque le fue imposible contactar a su pareja para obtener su consentimiento por escrito.
Kumi Tsukahara, activista de Action for Safe Abortion Japan, le dijo a The Guardian que los anticonceptivos orales no se legalizaron sino hasta 1999, después de un debate legal de nueve años, mientras que el viagra se aprobó en solo seis meses.
El consentimiento conyugal se convierte en un problema cuando hay un desacuerdo con el cónyuge o el cónyuge obliga a la mujer a dar a luz en contra de su voluntad.
– Kumi Tsukahara
Según el Ministerio de Salud japonés, en 2020 se realizaron alrededor de 140 mil abortos quirúrgicos. De acuerdo con información proporcionada por Safe Abortion Japan Project, los abortos no están cubiertos por el seguro y tienen un costo de entre 90 mil y 150 mil yenes (700 a 1200 dólares estadounidenses) durante las primeras 11 semanas de gestación.
En 2016, el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) instó a Japón a eliminar el requisito del consentimiento del cónyuge.
Liderado por el conservador Partido Liberal Democrático durante la mayor parte de la era posterior a la Segunda Guerra Mundial, Japón está detrás de muchos de sus pares en el cuidado reproductivo de las mujeres.