Una jueza del Tribunal Superior de Londres dictaminó este 13 de junio que Archie Battersbee, un niño de 12 años que sufre daño cerebral, está muerto y que el tratamiento de soporte vital debe suspenderse a pesar de que su familia ruega por que continúe.
El pasado 7 de abril, Battersbee fue encontrado inconsciente con una liga alrededor de su cuello en su casa en Southend, Essex, por lo que le fue inducido un coma. Inicialmente se supuso que se trataba de un “extraño accidente”, pero su familia cree que podría haber participado en un peligroso desafío de Internet.
Desde entonces, el menor ha estado en el centro de una disputa en el Tribunal Superior después de que los médicos que lo trataron en el Royal London Hospital, en Whitechapel, Londres, dijeran que creían que Archie tenía muerte cerebral y que su ventilador debería desconectarse.
De acuerdo con información del Daily Mail, este 13 de junio, un especialista declaró ante el Tribunal que el pronóstico del niño era “muy grave” y que sus posibilidades de recuperación eran “muy bajas”. Cuando el equipo legal del Royal London Hospital, Barts Health NHS Trust, le preguntó si partes del cerebro y la médula espinal de Archie habían muerto y se estaban descomponiendo, el especialista respondió que sí.
Basándose en la información provista por el experto, la jueza Emma Arbuthnot dictaminó que Archie ya había fallecido y dijo que los médicos podían dejar de tratarlo legalmente:
Encuentro que Archie murió al mediodía del 31 de mayo de 2022, poco después de que se hicieran las resonancias magnéticas ese día. Creo que el cese irreversible de la función del tronco encefálico se ha establecido de manera concluyente. Doy permiso a los profesionales médicos del Royal London Hospital para que dejen de ventilar mecánicamente a Archie Battersbee.
Sin embargo, un representante legal de la familia, el abogado Bruno Quintavalle, le dijo a la jueza que el corazón de Archie aún latía. Además, se planteó la cuestión de si se había seguido “el procedimiento correcto” y si se habían tenido en cuenta las opiniones de la familia.
Por su parte, los padres de Archie, Hollie Dance, de 46 años, y Paul Battersbee, de 56, exigen que el menor continúe su tratamiento, pues creen que si se les da más tiempo, su condición podría mejorar. En una declaración desgarradora afuera de la corte, Hollie dijo que estaba “devastada y decepcionada” por el veredicto y agregó que apelará la decisión del Tribunal:
Estoy devastada y extremadamente decepcionada por el fallo de la jueza después de semanas de luchar en una batalla legal cuando quería estar al lado de la cama de mi hijo pequeño. Basar este juicio en una prueba de resonancia magnética y que es ‘probable’ que esté muerto no es suficiente. Esto es solo el comienzo y no abandonaré la lucha por mi hijo.
Si bien la jueza Arbuthnot aún no ha dado un plazo para presentar una apelación, el equipo legal de la familia aseguró que solicitarán una suspensión de la ejecución para que el soporte vital de Archie no se desconecte hasta que haya concluido el proceso de apelación.
Los argumentos serían escuchados por el Tribunal de Apelación y de aprobarse, el caso podría ser escuchado en el Tribunal Supremo, el último tribunal de apelación para casos civiles en el Reino Unido.
A través de un comunicado, el director médico del grupo del Royal London Hospital, Alistair Chesser, dijo que Archie recibirá la “mejor atención posible” a medida que se retire su soporte vital. Además, agregó que no se harán cambios hasta que la familia haya tenido tiempo de apelar el fallo:
Este es un momento triste y difícil para la familia de Archie y nuestros pensamientos y condolencias están con ellos mientras aceptan lo que sucedió.