Tener un fin de semana de 3 días y laborar solamente 4 podría ser una realidad, y la ciencia lo demuestra. Un grupo de investigación de la Universidad de Ohio siguió a 7,500 personas mayores de 32 años durante sus jornadas laborales, mostrando que al trabajar de 5 a 6 días por semana se corría el riesgo de triplicar enfermedades del corazón, cáncer, diabetes y artritis.
Otro estudio realizado en Suecia comprobó que las personas que laboran cuatro días a la semana tienen menos probabilidad de enfermar, además que mantienen una actitud positiva e incluso aumentan la productividad.
1. Incrementa la productividad
Los empleados que descansan mejor son más productivos debido a que pueden relajarse por más tiempo, además de dedicarse a actividades extralaborales que los hacen sentirse plenos.
2. Mejora tu relación familiar
Todas sabemos lo difícil que es lograr un equilibro entre la vida familiar y la vida laboral, sobre todo cuando tu trabajo te obliga a permanecer hasta por 10 horas dentro de la oficina. Por lo tanto, un trabajo de solo 4 días puede beneficiarte no solo a ti sino a cientos de familias, dándoles a sus empleados la oportunidad de educar y convivir con sus hijos.
3. Lealtad laboral
Perder personal trae consigo una pérdida de dinero. Por lo tanto, para aquellas empresas que tienen recursos limitados y no pueden dar múltiples beneficios, trabajar con este horario les permitirá incentivar a sus empleados.
4. Estimula la creatividad
Vivimos en la era de la innovación. Las compañías más exitosas suelen ser las más creativas. Así que descansar durante 3 días permitirá a los empleados recargar energía para aportar nuevas ideas.
5. Mejora el medio ambiente
Trabajar largas jornadas deja una huella imborrable en el medio ambiente, pues se emiten grandes cantidades de carbono, ya sea al momento de transportarnos o mantener la computadora prendida. Si laboramos menos días lograremos un impacto positivo para el planeta.