Llorar tiene un efecto liberador cuando se experimenta dolor, tristeza o estrés. Pero, según un reciente estudio, también podría ayudarnos a perder peso corporal.
De acuerdo con el doctor Aaron Neufeld, optometrista principal de Los Altos Optometric Group y autor principal de The EYE Digest, existen tres tipos de lágrimas: psíquicas, basales y reflejas. Las lágrimas psíquicas están relacionadas con emociones como la tristeza, el estrés, el placer e incluso la felicidad; las basales son aquellas cuya función es mantener húmeda la córnea; y las reflejas son las producidas por alguna irritación externa como humo o viento.
Ahora bien, de estos tres tipos de lágrimas, son las psíquicas las que concentran una composición química que podría ayudar a reducir el peso corporal debido a la presencia de cortisol, la hormona que se libera como respuesta al estrés. Otro dato obtenido en la investigación es que derramar lágrimas entre las siete y las 10 de la noche potencia la liberación del cortisol.
El bioquímico William Frey concluyó en su propia indagatoria sobre la composición química de las lágrimas que mientras estas sean emocionales su liberación limpia de diversas toxinas al cuerpo; es decir, llorar es un proceso excretor que elimina sustancias acumuladas durante los momentos emocionales de estrés y evita que el cuerpo entre en el proceso de acumulación de grasa.
Así que si estás pensando ver una serie romántica o releer las cartas de tu ex, recuerda que conviene hacerlo por la noche antes de dormir, así podrías matar dos pájaros de un tiro.