Los bebés alimentados con fórmula láctea o de manera mixta (fórmula más leche materna) registran un mayor riesgo de padecer a futuro enfermedades como obesidad, diabetes mellitus y patologías relacionadas con el aparato gatrointestinal, concluyó un estudio.
Karla Nuño Anguiano, integrante del cuerpo académico de Nutrición y Biotecnología en Salud del Centro Universitario de Tonalá (CUTonalá), explicó que, derivado de la investigación, se observó una mayor cantidad de enterobacterias en los menores alimentados con fórmula que en los que consumen leche materna.
Entre estas enterobacterias identificadas se encuentra la Salmonellay escherichia coli (bacterias que viven en el intestino), que provocan un desequilibrio asociado con un mayor riesgo de padecer conforme se envejece y se adquieren malos hábitos alimenticios, enfermedades como la obesidad, diabetes y otras del aparato gastrointestinal.
Por el contrario, los bebés alimentados únicamente con leche materna desarrollaron más lactobacilos, bacterias que fortalecen el sistema inmune del aparato intestinal, dijo Nuño Anguiano.
La investigación se realizó con una muestra de 49 bebés sanos con lactancia materna exclusiva desde su nacimiento; posteriormente, algunos recibieron alimentación mixta y otros solo fórmula láctea.
De igual manera, se analizaron los hábitos alimenticios de las madres, en los cuales se encontró una mala calidad debido a mitos en torno a qué comer o evitar durante el periodo de lactancia materna.
En este sentido, la especialista dijo que si las mujeres consumen una dieta rica en pescado y semillas podrían producir una leche de mayor calidad, rica en omega 3 y 6 que respalda el desarrollo intelectual de sus bebés.