Hay una edad en la que el mejor panorama para el fin de semana es quedarse en casa acostada viendo alguna serie o aprovechar el día para dormir y descansar.
Si tu mamá te regaña porque pasas todo el domingo en cama, recuérdale que no es un desperdicio de tiempo sino todo lo contrario: es una inversión en tu salud, pues un reciente estudio demostró que quienes duermen menos de cinco horas al día tienen mayores probabilidades de morir, en comparación de aquellos que dedican hasta siete horas a esta gloriosa actividad.
Dormir es la clave de la vida eterna
Tus amigos pueden llamarte “aburrida”, tu familia puede apodarte “abuelita”, pero lo que no saben es que has encontrado el secreto de la vida eterna.
De acuerdo con el estudio realizado por el Instituto de Investigación del Estrés, en la Universidad de Estocolmo, las personas menores de 65 años que duermen cinco horas o menos al día tienen un mayor riesgo de muerte (65 % más) en comparación con aquellos que duermen de seis a siete horas diarias.
¡Recupera el tiempo perdido!
Si entre semana no puedes dormir las horas adecuadas, no te preocupes pues al dormir más horas los fines de semana estarás recuperando el tiempo de sueño necesario para alargar tu vida. Así lo comprobó la investigación, pues aquellas personas que durmieron durante un corto periodo de tiempo durante la semana y una mayor cantidad durante el fin registraron la misma tasa de mortalidad que aquellos que duermen constantemente durante seis o siete horas por noche.
¿Y el mito de las 8 horas diarias?
Sin embargo, hay malas noticias para quienes duermen demasiado. Esta misma investigación encontró que al dormir más de ocho horas al día se tiene una tasa de mortalidad 25 por cierto más elevada que aquellos que solo duermen seis o siete, debido a que el exceso de sueño es un síntoma de una serie de problemas de salud ocultos.