Existe una gran cantidad de métodos anticonceptivos para mujeres (¿y los hombres para cuándo?) que se adaptan a las necesidades y al poder adquisitivo de cada una.
Están los condones masculino y femenino, las píldoras, el parche, el anillo, el implante, el DIU, el diafragma, la esterilización… ¿Pero sabes qué es el SIU y en qué se diferencia del DIU?
¿Qué es el SIU?
El Sistema Intrauterino (SIU) es un método anticonceptivo reversible (o sea que cuando lo retires puedes tener hijos) y de acción prolongada que proporciona protección hasta por cinco años. Esto lo vuelve ideal para las mujeres a las que les resulta tediosa la rutina de la aplicación mensual o diaria. Además de ser uno de los métodos más pequeños, con el 99.8 por ciento de efectividad, también es el que más protección otorga.
SIU y DIU: parecen lo mismo pero no lo son
Aunque una sola letra puede hacerlos parecer muy similares, existen muchas diferencias entre uno y otro. El DIU es una pequeña “T” recubierta de alambre de cobre que sirve como barrera para impedir el paso de los espermatozoides, mientras que el SIU libera procrastina, hormona que espesa el moco cervical y dificulta el movimiento de los espermatozoides.
¡Dile adiós al sangrado abundante!
Si bien al colocarlo puedes sufrir leves mareos y cólicos (que se quitan con reposo), el SIU te otorga otros beneficios, además de la anticoncepción con menor dolor y sangrado menstrual, disminución del acné, eliminación de pelitos en la cara, control del ovario poliquístico, no afecta el peso corporal y lo puedes usar durante la lactancia sin problema alguno.
No importa cuál sea el método anticonceptivo que elijas, recuerda siempre consultar a tu médico para que él te pueda orientar de acuerdo con tus necesidades.