Los horarios de trabajo son dispares en todo el mundo. Por una u otra razón, a veces falta tiempo para terminar las tareas de la oficina y se suele continuar con ellas en casa o en el mismo lugar de trabajo. Si eres la primera en llegar y la última en salir de la oficina o de las que trabajan muchas horas extras, tal vez no solo estés restándole tiempo a tu convivencia familiar y social… también a tu salud.
Trabajar 55 horas o más por semana elevaría el riesgo de sufrir un derrame cerebral o un ataque cardiaco, advierten investigadores del University College London, en Reino Unido. El estudio publicado en la revista científica The Lancet refiere que trabajar más de 10 horas cada día tendría un impacto negativo, en comparación con una jornada estándar de 35 a 40 horas semanales (un promedio de 8 horas cada día).
Los investigadores concluyeron que quienes trabajan 3 horas más al día tienen un 33% más de probabilidades de sufrir un derrame cerebral, el cual puede ser fatal. Esta asociación de riesgo se mantuvo incluso después de tomar en cuenta otros comportamientos como el tabaquismo, el consumo de alcohol y la falta de actividad física, así como los factores de riesgo cardiovascular, incluyendo la presión y el colesterol altos.
Los investigadores percibieron que el problema de todo esto no son solo las tres horas extra que pasas sentada en la oficina, sino que por este tiempo trabajando no cuidas de ti misma, no sabes qué significa pasar una hora en el gimnasio o tener tiempo para relajarse ni llevar una dieta equilibrada, dormir el tiempo suficiente o, simplemente, disfrutar de un tiempo en familia.
¿Esta es una realidad en tu vida? Estás a tiempo de poner una solución para no afectar tu salud.