No hay mejor terapia gratuita contra la tristeza y el estrés que una buena sesión de baile, y no tiene que ser profesional, basta con poner tu canción favorita, tomar un “micrófono” y empezar a mover esas caderas para dejar todas las penas atrás.
De hecho, los mismos investigadores lo sustentan con investigaciones de cómo el baile afecta a nuestras emociones. Una investigación realizada en la Universidad de Örebro, en Suecia, sometió al estudio Influencing Self-rated health among adolescent girls with dance intervention (Influencia en el estado de salud autoevaluado de niñas adolescentes mediante intervención del baile) a jóvenes de 13 a 18 años con problemas de depresión, fatiga, ansiedad y también con dolores de cabeza, cuello y espalda.
Mueve ese esqueleto
La meta era demostrar que el baile es una actividad que beneficia la salud mental, y tras ocho meses de baile con sesiones de 75 minutos dos días por semana, notaron cómo su autoestima subió, y su estado de ánimo y capacidad para enfrentarse a los problemas diarios mejoró muchísimo. ¿Necesitas un motivo más?
¡Adiós, tristeza!
Si tienes un bajón de ánimos por tu trabajo, si la situación con tu pareja no va bien, o tuviste alguna discusión con tu mejor amiga, ¡pon a todo volumen esa playlist en Spotify y baila como si fueras Beyoncé en el Super Bowl! Recuerda que todo tiene solución y pasarás un tiempo de lo más agradable.