La paternidad es un reto que puede meter en crisis hasta a la pareja más unida y perfecta. A ese nuevo estilo de vida de los papás se agregan conductas y preocupaciones que antes no existían, como el estrés.
El estrés es un sentimiento de tensión física y emocional y, desafortunadamente, es también una de las condiciones más ignoradas en sociedad. El estrés crónico, al ser constante durante largas temporadas, hace que las personas lleguen a acostumbrarse tanto a su condición que dejan de notarla, lo cual se vuelve peligroso para la salud física y mental.
Recientes estudios descubrieron que, para las madres, lidiar con un marido puede llegar a ser hasta 10 veces más estresante que atender a un hijo.
El estudio realizado por la Universidad de Padua, en Italia, reveló que no son los hijos el motivo principal de estrés en las madres sino los esposos, quienes generan nerviosismo en sus parejas.
Esto puede sonar agresivo y tajante para los padres, pero dentro de la investigación se resaltaron algunos puntos en los que tiene sentido que las mamás vivan estresadas por culpa de sus maridos. Una de estas conclusiones fue que, en el mayor de los casos, la madre suele encargarse de más tareas que el padre, además de pasar más tiempo con los hijos.
Esa realidad poco equitativa genera los primeros sentimientos de frustración; a esto agregamos que además muchas mujeres llegan a sentir que sus esposos son más como “niños grandes” que compañeros en un mismo nivel.
Otro análisis realizado con más de siete mil madres norteamericanas reveló que para el 46 por ciento de ellas sus parejas son más estresantes que sus hijos:
Un niño de cuatro años va a comportarse como un niño de cuatro años, pero un hombre de 35 comportándose como un niño de cuatro años es muy estresante, se supone que es más listo que todo eso.
Esperar a que una pareja entienda su papel familiar y sea responsable de su parte puede ser un proceso exhaustivo para algunas madres. Por otro lado, la tensión de mantener una buena relación en la intimidad se vuelve el ingrediente extra para una receta de madres en constante estrés.
Este par de estudios no necesariamente intenta calificar a los padres como una pieza inútil en el trabajo de la paternidad. La comunidad de Universo Mama, página encargada de difundir el estudio de la universidad italiana, usa estos resultados para invitar a la reflexión y al ejercicio de la comunicación en pareja, por ejemplo: ¿qué piensas de mi desempeño como madre/padre?
Entre las recomendaciones que se sugieren, específicamente para las mamás, están ignorar la cultura de las “supermadres” (aquellas que hacen todo), delegar más responsabilidades a la pareja y evitar sentir culpa por disfrutar el tiempo libre y de relajación.
Si eres madre y percibes señales de estrés crónico, deja que el padre de tus hijos se encargue de la situación un rato, haz cita en el spa y consiéntete con tiempo calidad contigo misma. No únicamente lo mereces: es necesario para tu salud.