Si eres inteligente, divertida, trabajadora y segura de ti misma, los hombres podrían verte como una amenaza y por eso te es difícil encontrar una pareja.
Las mujeres entendemos que no necesitamos a un hombre para estar completas y sentirnos realizadas. Con esto no nos referimos a que no los queremos o que los veamos como seres innecesarios, sino que tener a un chico a nuestro lado radica en el querer y no en el necesitar. Pero al parecer este sentimiento de autosuficiencia los asusta.
Los hombres prefieren salir con mujeres que no desafíen su inteligencia
Un estudio realizado por la Warsaw School of Economics sometió a 500 alumnos de la Universidad de Columbia a una sesión de citas rápidas. Los criterios decisivos para invitar a una persona a salir eran qué tan atractivos o inteligentes les parecían.
Tanto mujeres como hombres prefirieron a aquellos que eran guapos y listos, pero las mujeres estaban dispuestas a sacrificar la apariencia siempre y cuando hubiera inteligencia, mientras que para los hombres un intelecto elevado restaba puntos de atractivo, pues sentían disminuida su masculinidad.
La confianza es vista de diferente manera entre hombres y mujeres
Las expertas en estudios de género Melissa J. Williams y Larissa Tiedens explicaron que los hombres fuertes y seguros de sí mismos son aprobados por sus compañeros en el área de trabajo, pero las mujeres con estas características son vistas como engreídas y desagradables.
También afirman que esta realidad se proyecta más allá del ambiente laboral, porque la sociedad tiene arraigada la construcción de que los varones deben ser asertivos y protectores, mientras que nosotras debemos ser cariñosas y sumisas.
Este tipo de investigaciones no pretende afirmar que todos los hombres se sienten intimidados por mujeres inteligentes y fuertes, sino que, en muchos casos, existe un patrón al momento de elegir pareja y este se inclina a que ellos tienen miedo de relacionarse con chicas independientes.
Si eres alguien fuerte y no has encontrado pareja, no te desesperes y no renuncies a tu forma de ser. La persona correcta llegará a tiempo y te querrá tal como eres sin sentirse opacado por tu cerebro y tu personalidad.