A mucha gente le encanta acurrucarse con sus mascotas por la noche, especialmente durante los fríos meses de invierno. Así que si eres una de esas chicas que prefieren dormir con su perro que con alguien más, ¡no te sientas mal!, pues tu amigo peludo es mejor compañero para dormir que tu pareja.
Sí, de acuerdo con un nuevo estudio, las mujeres descansan mucho más cuando comparten su cama con un perro que con otro humano. Así que la próxima vez que pelees con tu novio no te sientas mal al mandarlo a dormir al sofá.
¿Cómo se logró el estudio?
Básicamente, se enfocaron en estudiar la calidad del sueño. Las participantes llenaron cuestionarios sobre sus hábitos y calidad de sueño en las noches; les preguntaron qué tan seguras y cómodas se sentían al dormir con un perro; a las mujeres con pareja se les preguntó cómo la otra persona afectaba su sueño, sentimientos y seguridad durante la noche.
Adiós, hombres
Así se llegó a la conclusión de que dormir con otras personas puede llegar a ser sumamente incómodo y estresante, afectando el sueño de las mujeres. Los investigadores Christy Hoffman, Haylee Stutz y Tarrie Vasilopoulos reportaron lo siguiente:
Comparado con las mujeres que duermen con parejas humanas, dormir con perros es más calmado y trae un sentimiento mayor de comodidad y seguridad.
Las parejas son las que más causan perturbaciones en el sueño de las mujeres, pues los perros tienen menos probabilidades de molestarlas y despertarlas. Parece que los hombres tendrán que pasar un poco más de tiempo en el sofá de la casa.
Un cachorrito es lo mejor
El estudio agregó que los dueños de perros tienden a tener mejores hábitos de sueños y rutinas diarias más estrictas que los que no tienen uno:
Los dueños de perros tienen que adaptarse a las necesidades de sus perros para ir al baño cada mañana, y esto ayuda a que se mantengan en una rutina de despertar relativamente estricta. Y los principales periodos de sueño de los perros tienden a coincidir más estrechamente con los humanos.
Los cachorros como compañeros de cama reducen la probabilidad de tener pesadillas, y los dueños tardan menos en quedarse dormidos por la seguridad que les proporcionan.
Lamentablemente no aplica en gatos
El estudio arrojó también que los gatos son igualmente malos compañeros para tener un sueño agradable y largo; Hoffman dijo:
Los gatos en la cama, por otro lado, son igual de desastrosos que los humanos y dan menos comodidad y seguridad.
Lo sentimos, chicas, parece que tendrán que escoger entre su mascota favorita y él… al menos solo a la hora de ir a la cama.
