Demostrando gran valor, la actriz mexicana Verónica Jaspeado habló sobre su terrible vivencia como una de las víctimas de la secta NXIVM y mencionó que, a pesar de sentir vergüenza por hablar del tema, espera que su oscura experiencia le sirva a muchas personas.
La talentosa actriz de Vino el amor comentó que nadie está exento de caer en las redes de personas malvadas, quienes, con sus manipulaciones, terminan afectando por completo la vida de sus víctimas.
La secta sexual NXIVM, liderada por Keith Raniere, se vendía como una oportunidad única para que las personas lograran descubrir y usar todo su potencial para cambiar el mundo. Lamentablemente, muchos los famosos y personas influyentes terminaron cayendo en sus redes, padeciendo toda la macabra perversidad que ha brotado de la mente de este líder psicópata.
La secta inició en Estados Unidos, pero luego se expandió hasta México, lugar donde Verónica Jaspeado fue reclutada. Hoy, finalmente, la actriz de La herencia decidió contar en el programa Ventaneando su experiencia en esta secta.
Es fuerte y es real. Mira, también si me animé a hablar, es porque justamente le puede pasar a cualquiera, ¿sabes? Justamente ese pensamiento de: “A mí nunca me pasaría” es el primer paso con el cual te podría pasar. No estamos vacunados, de verdad, y es importante abrir los ojos y darnos cuenta de que hay mucha gente mala.
Afortunadamente, Keith Raniere fue denunciado por una valiente mujer que se sobrepuso a sus amenazas. Hoy en día, el líder de la secta purga una condena de 120 años en una prisión de Estados Unidos por múltiples delitos que incluyen la esclavitud y violencia sexual.
Mostrándose sincera, la también cantante mencionó que tuvo muchas dudas acerca de mostrar públicamente lo duro que fue vivir este oscuro capítulo en su vida, ya que narró con más detalle su amarga experiencia en la serie The Vow, de la plataforma HBO Max.
Lo dude muchísimo, sinceramente lo dudé muchísimo, porque decía ya, me libero de todo eso. Pero al mismo tiempo había una parte en la que yo decía: “Si mi experiencia le puede servir a otras personas, me aguanto mi vergüenza”. Actualmente me siento tranquila, me siento agradecida, me siento emocionada porque traigo un proyecto.