Escuchar la palabra “cambio” puede ser intimidante porque implica una modificación de un estado o condición; salir de nuestra zona de confort y realizar una transformación. Cuando nos encontramos en la búsqueda de un mejor estilo de vida el cambio es necesario e inevitable, además de que no hay mejor sensación que la de sentirte con energía renovada y descubrir que la vida aún tiene muchas cosas para sorprenderte.
Si te encuentras justo en este punto, debes saber que realizar cambios significativos es posible en sólo un mes, así que no lo pienses tanto y lee los 12 pasos necesarios para lograrlo.
Semana 1: Cuerpo y hábitos
1. Levántate temprano
No por nada los abuelos despertaban apenas clareaba el sol. Si constantemente sientes que no te alcanza el día es probable que sea porque no lo haces rendir. Si te levantas todos los días alrededor de las 6 de la mañana tendrás no sólo el tiempo necesario para realizar tus actividades, sino además tendrás espacio para dedicarte a cosas que te producen placer. Es el momento ideal para ejercitarte o para realizar alguna actividad para la cual necesites tranquilidad y silencio.
2. Come bien
Y por comer bien me refiero a tener una alimentación sana y nutritiva. A veces la energía que tenemos disponible la utilizamos en contrarrestar nuestros malos hábitos como el consumo de alcohol, grasas, cigarros, exceso de azúcares y un largo etcétera. Si no tienes una condición de salud especial, para hacer este cambio no se necesita más que lo que todos sabemos: eliminar o reducir el consumo de carnes rojas, la comida frita, harinas, refrescos y jugos, embutidos y comida chatarra en general. También ser más conscientes del tamaño de las porciones y los horarios de comida representará un beneficio duradero.
3. Muévete
Haz lo que quieras pero haz algo. Más que tener un cuerpo atractivo, tu mayor aliciente es que tendrás un cuerpo sano y dispuesto para disfrutar de la vida en todos los aspectos. Puedes inscribirte en un gimnasio, trotar, bailar, hacer yoga, irte al trabajo a pie o subir escaleras. Lo importante es moverse.
Semana 2: Limpieza integral
1. Limpia a profundidad
Para que llegue algo nuevo necesitas deshacerte de lo viejo, así que es momento de limpiar cada rincón de los sitios en los que pasas tiempo; mueve mesas, armarios, cajones, repisas y deja lo que realmente necesitas, que te gusta o te haga sentir bien.
2. Termina pendientes y deberes
Si la lista de propósitos de año nuevo sigue intacta, es momento de cumplir, si no todos, por lo menos la mayoría o quemarla. La idea es realizar acciones concretas para cumplir con pendientes importantes, como inscribirte en el curso de repostería que deseas hace años, o comenzar el ahorro para las próximas vacaciones. Es necesario liberarse del peso de las cosas por hacer.
3. Despeja tu entorno
Ya lo hiciste con el físico, ahora continúa con el emocional. Parte de la naturaleza humana es la evolución constante, por eso es que al paso del tiempo un día descubres que no tienes nada en común con algunas personas. Limpia todas las relaciones que no te aportan cosas positivas y que no te dejan ninguna enseñanza. Déjate fluir y ser asertiva en tu forma de relacionarte con los demás.
Semana 3: Planes, sueños y metas
1. Arma un plan
Ahora es momento de ver hacia adelante, no sólo en cuestión laboral y económica, sino también sobre las cosas que amas y que te hacen vibrar. Asegúrate de ser muy sincera para que sea un plan que sientas ganas de realizar y recuerda que todo es necesario: el tiempo para estar con tus amigos y familia, así como para descansar y reflexionar a solas.
2. Haz una lista de lo ‘imposible’
Incluye todo aquello que siempre haz dicho que no podrías cumplir nunca, de cosas prácticamente irreales y sin ninguna lógica aparente. Este ejercicio sirve para despejar la mente de los sueños que de pronto rondan por la mente y darte cuenta de qué es lo que en realidad deseas.
3. Elabora un plan para cada día
Durante la noche aprovecha el silencio y la tranquilidad para hacer una lista de los planes por realizar. Al hacer una estrategia, tu productividad aumentará porque tienes la tranquilidad de tener un plan de acción.
Semana 4: Ampliar las fronteras
1. Trata de hacer cosas diferentes
Los pequeños cambios pueden ser los más significativos, desde tomar una ruta diferente hacia el trabajo hasta conocer el pequeño café cercano a tu casa, cambiar de marca de champú, lo que sea. Al salir de tu rutina cambia tu perspectiva, se amplían tus horizontes y te impulsas a salir de tus límites reales o ficticios.
2. Deja tu zona de confort
Es una de las experiencias más difíciles pero también más liberadoras. Cambia de casa o trabajo si lo necesitas; dile a tu jefe lo que te molesta; enfrenta a tu pareja y dile lo que realmente quieres; aventúrate a un lugar desconocido; intenta conocer personas diferentes. Encarar tus miedos y fobias te hace más fuerte y segura de ti misma.
3. Descansa
No todo en la vida es trabajo y más trabajo. También es necesario bajar la velocidad, tomar un respiro y hacer una pausa para desconectarte de todo. Apaga tu celular, si es posible sal de casa y disfruta un momento de paz y quietud; esto te dará la energía necesaria para hacer todo lo que deseas.
