Tener una vida social que pueda catalogarse como “saludable”, es no necesitar conectarse a Facebook para sentirse inspirado y tomar energías, que es justo lo que pasa con estas redes: entramos a ellas para recibir un shot de energía temporal, como para leer nuevas notificaciones o para descubrir nueva información que tal vez nos parezca interesante.
El problema será qué clase de información solemos tener en nuestras cuentas y sobre qué nos gustaría aprender en ellas. El tiempo en línea es exactamente el mismo tiempo que en la vida real; entonces, así como las podemos aprovechar, también las podemos desperdiciar. Por eso te dejamos una guía de 10 pasos para tener una vida más saludable y productiva en tus redes sociales.
1. Elimina lo que te haga ruido
Cansa ver siempre a la misma persona en las redes que te agota visual y emocionalmente, ya sea con las cosas que comparte, su manera de pensar o su forma de comunicarse. No necesariamente debemos estar de acuerdo con todas las personas a quienes seguimos. Debes aprender a reconocer que en las redes es mejor tomar distancia.
2. No tengas miedo a “dejar de seguir”
Deja de tenerle miedo a dejar de seguir o eliminar gente de tu inicio en Facebook. Si para ti es lo mejor y más sano, hazlo consciente de que no es personal y que puedes diferenciar tu vida en línea de la vida real y las relaciones que tienes con los que te rodean. El botón “dejar de seguir” te permite seguir teniendo esos contactos, pero sin necesidad de que aparezcan sus noticias en tu línea del tiempo.
3. Aprovecha tu tiempo en las redes
Una persona feliz con una vida saludable en redes sociales entiende que el tiempo en línea y el tiempo en la vida real transcurren a la misma velocidad, así que una vez que hayas depurado la información que lees diariamente, aprovecha por comenzar a seguir páginas y personas que de verdad tengan algo que te sirva o te enseñe algo positivo y de interés para ti.
4. Comparte siempre lo mejor de ti
Siempre habrá en la vida gente a la que no le guste ver a otros felices, y son esos mismos los que siempre dudan de la felicidad de los demás en las redes. Últimamente la energía negativa en las redes es tan fuerte que ser feliz y desinteresado se ha vuelto un acto radical, pero si tienes alguna noticia importante qué compartir a tus seres queridos, hazlo con naturalidad y sin que te importe el qué dirán.
5. Respeta más a las personas de la vida real
Existen personas que se preocupan tanto por tener una vida perfecta en redes sociales que terminan prefiriendo la armonía en línea y olvidan lo grosero que es dejar a una persona hablando sola por tener otra conversación por celular. Este hábito no es sano ni para ti ni para los que te rodean, y lo mejor es controlar la ansiedad por interactuar en línea.
6. Las redes sociales son sólo entretenimiento
Toma un momento para reflexionar sobre la vida de tus cuentas: ¿cuándo fue la primera vez que empezaste a usarlas?, ¿qué cosas compartías o publicabas?, y vuelve a aquellos días en los que nadie tenía que ser políticamente correcto, pues las redes sólo eran un lugar para divertirse un rato y volver a vivir allá afuera.
7. Sé una persona congruente con lo que escribes
Eres congruente cuando tu comportamiento y personalidad no cambia en la vida real, es decir, que eres congruente con lo que escribes en tus redes, pues lo que dices en “público” lo puedes sostener fácilmente en una plática privada, y viceversa.
8. Protege siempre tu intimidad
Cuando tienes muy claro el concepto de intimidad y sabes mantener para ti lo que pasa en tu vida sin tener la necesidad de compartirlo en las redes, estás protegiendo tu privacidad del mundo que te observa. Así que no necesariamente publiques cada uno de los pasos de tu día.
9. Los likes y favs no son refuerzos de autoestima
Para ti y tu vida lo mejor es dejar de precisar de esos pequeños “refuerzos psicológicos” como los likes y comentarios a tu favor, ya que a la larga se vuelven algo adictivo e insano, pues no son gratificaciones útiles ni cumplidos reales.
10. Aprende a desconectarte por completo
La verdad es que puedes dejar de tomarte tan en serio y disfrutar de tu cuenta y las personas o páginas a las que sigues. Aléjate cuando creas que es el momento: puedes dar de baja tus cuentas una temporada o silenciar todas las notificaciones para darte tu tiempo. Vete por el camino más sano, comparte lo mejor de ti y simplemente diviértete.