Los zapatos con tacón nos hacen lucir altas, delgadas, con piernas y glúteos más firmes… en resumidas cuentas, como toda un modelo. Además, amamos sus colores, diseños, formas y diferentes alturas.
Pero también es verdad que llegan a ser molestos después de usarlos por varias horas e incluso días. Esto lo saben las chicas que tienen una relación amor-odio con las zapatillas. Por eso compartimos 10 razones para que dejes de usarlos de una vez por todas, y te sientas como en el cielo al caminar.
1. Tus piernas se alargan
Cuando usas tacones tus piernas lucen largas y estilizadas. Pero ¡oh sorpresa! La realidad es que tus extremidades inferiores crecen cuando te quitas los tacones.
Así lo asegura un estudio publicado en The Journal of Applied Physiology, en el cual se asegura que las chicas que usan zapatos de tacón no solo caminan dando pasos más cortos, sino que tienen los músculos de las pantorrillas más cortos de lo normal.
2. Adiós al talón de Aquiles
Usar tacones no solo te deja las pantorrillas secas y agrietadas: también acorta los tendones de Aquiles y ejerce un exceso de presión en los talones.
La buena noticia es que, al dejar de usar tacones, tus pies se recuperan y la inflamación disminuye rápidamente.
3. Olvídate del dolor de espalda
Cuando usas tacones tu trasero parece más grande y firme, además, sacas el pecho. Esto ocurre porque al elevarte tu pelvis se ve obligada a inclinarse para que tu cuerpo no caiga contra el suelo.
“Tienes una silueta increíble, pero a costa de cargar de presión toda la región lumbar de tu columna vertebral, así como los músculos encargados de estabilizarla”.
– Todd Sinett, quiropráctico neoyorquino.
4. No te preocupes por las várices
Estudios afirman que hay ciertas dificultades circulatorias al utilizar zapatos con tacones, en especial tacones de aguja. Su uso continuo incrementa la presión en la parte inferior del cuerpo y dificulta el retorno de la sangre hacia el corazón. Como consecuencia, el flujo sanguíneo deja de circular con normalidad y, en cuestión de tiempo, se producen esas pequeñas arañitas y venas varicosas.
5. Pies suaves todo el tiempo
Las callosidades pueden producirse por múltiples factores y el uso de tacones es uno de ellos. Dado que el pie está sometido a una constante fricción, su piel se va endureciendo.
A pesar de que dejándolos de usar no se quitarán por completo, esto facilitará su tratamiento y será más fácil eliminarlas.
6. La rodilla de corredor desaparece
Rodilla de corredor es el término que utilizan los médicos para referirse a una serie de afecciones de la rótula.
Al utilizar este calzado alto, el centro de gravedad de tu cuerpo se ve obligado a desplazarse para mantener el equilibrio al caminar, sobrecargando las rodillas y perjudicando tus ligamentos.
7. Cero deformaciones
El 75% de las mujeres que usan zapatos altos todos los días desarrollan juanetes, artritis en el dedo gordo, callos y verrugas plantares.
8. Piernas relajadas todo el tiempo
Al usar tacones obligas a tus tobillos a doblarse hacia adelante, un movimiento que dificulta la circulación en las extremidades inferiores, lo que te cansa más rápido.
9. Mejora tu equilibro
Según un reciente estudio en el que se analizó la postura y la forma de caminar de las asistentes de vuelo de unas aerolíneas de Corea del Sur, el uso regular de tacones altos conduce al desequilibrio en los músculos que rodean a los tobillos. Usar zapatos planos hace que los mencionados músculos trabajen adecuadamente, proporcionando un mejor equilibrio.
10. No más pies hinchados
Con el uso de zapatos altos los pies tienden a hincharse, por lo que tomar agua y caminar no ayudará mucho si el uso de tacones es constante.