Las mejores amigas no se eligen por coincidencia, llegan a nuestra vida porque estaban destinadas a compartir todas nuestras aventuras, tristezas, risas y llantos. El universo crea un imán para conectar con quien será nuestra más grande confidente. Así es como la vida nos brinda a una persona que estará a nuestro lado. Una mejor amiga es una hermana a la cual tenemos la oportunidad de elegir. Esto es para ti, mi hermana de distinta sangre.
Aún recuerdo la primera vez que nos dijimos hola, había una conexión tan grande en esa simple palabra que desde ese instante supe que estaríamos juntas durante un largo tiempo. Los años continúan pasando y nuestra amistad sólo sigue creciendo, hemos vivido tantas aventuras, que los recuerdos jamás se desvanecen, sólo continúan creciendo y estoy segura que serán grandes historias que podremos contarle a nuestros nietos.
Siempre que miro hacia el pasado apareces tú en cada recuerdo, tu rostro siempre aparece en cada instante de mi vida, aún puedo ver las noches en vela que pasamos llorando porque un tipo se atrevió a rompernos el corazón. Siempre has sido una guerrera que ha peleado todas las batallas de la vida a mi lado. Y sabes de sobra que estas experiencias sólo han fortalecido nuestra amistad.
Eres la hermana que pude elegir, una hermana que cuenta con sangre distinta a la mía, pero que sin duda forma un lazo mucho más grande. Tú eres mi mejor amiga y definitivamente mi casa es tu segundo hogar. Eres el hombro perfecto en el que puedo desahogarme y llorar. Eres la compañera perfecta de aventuras.
Sé que puedo hablar contigo de las pequeñas cosas que le dan sentido a la vida, puedo decirte con confianza cuando cometes un error, cuando te ves fea, cando eres terca y obstinada. La verdad es que todas esas cualidades encajan perfecto con las mías. Sabes que siempre estaré ahí para ti cuando lo necesites, luchando a tu lado, riendo y llorando cuando te rompan el corazón.
Admiro tantas de tus cualidades, eres fuerte, independiente, noble y hermosa por dentro y por fuera. Honestamente no sé cómo lo consigues, pero siempre logras ser el pilar que necesito para continuar de pie.
Existen mil personas a mi alrededor, pero por mucho tú eres mi persona favorita, y es algo que no cambiaría por nada.
Sé que no puedo pagarte por todos los momentos que hemos pasado juntas, pero creo que es más grande si te agradezco por ellos. Quiero agradecerte por la enorme paciencia que has tenido al ser mi amiga, gracias por siempre darme un consejo sincero.
Sabes que siempre estaré a tu lado, sé que confías en mi y jamás te defraudaré. Porque dentro de una vida llena de inciertos, sé que no me equivoqué al elegir tu amistad. Contigo a mi lado la vida es mucho más fácil. Gracias por ser mi mejor amiga, mi hermana de distinta sangre.