Desde que somos niñas muchas imaginamos cómo seremos cuando seamos mayores de edad, qué carrera estudiaremos, si nos casaremos o viajaremos por el mundo, y pensamos que cumplir 30 años es como una meta a largo plazo, ni se diga de los 40, 50 o 60. Pero cuando menos acordamos, los años se van sumando y dejamos de tener 15 para tener 20, y al pasar esta barrera de la segunda década muchas viven con miedo a envejecer y comienzan a cuestionarse el porqué prefieren estar en cama que salir de fiesta.
Los gloriosos veintes son para disfrutar esas experiencias que en la adolescencia están prohibidas, en cambio, el tercer piso se caracteriza por traer un poco más de sabiduría y autoconocimiento a nuestra vida. Una mujer de 30 años sabe quién es, qué le gusta y que no, es por eso que antes de llegar a esa edad como mujeres debemos establecer ciertos cosas que debemos hacer que nos asegurarán un futuro más estable, relaciones más productivas y una vida más feliz.
1. Respétate a ti misma
El respeto implica cuidarte físicamente, practicar algún deporte, alimentarte sanamente y sobre todo cuidar tu salud mental. Es tiempo de decir adiós a las amistades negativas y a los galanes que solo te usan; evadir las situaciones destructivas hace que tu corazón y mente se sientan más felices. Si quieres decir algo acerca de una situación incómoda, hazlo, no guardes tus opiniones pues son importantes.
2. Ahora es el momento para experimentar
No tengas miedo de hacer algo que te nazca, si tienes ganas de cambiar tu estilo, ¡hazlo! Experimenta con tu físico o con las prendas que siempre has querido usar pero que no te atreves; corta y pinta tu cabello como siempre soñaste, si no te queda siempre podrás volver a tu antiguo look. Viaja a dónde te plazca, prueba nuevos alimentos, explora tu sexualidad en solitario, conoce todas tus facetas para que definas qué te gusta y que no.
3. Deja de lado las críticas
La gente siempre va a decir lo que piensa sin importar si te hace bien o mal, a veces es bueno ser sorda a esas opiniones, sobre todo cuando no son constructivas. Date tus gustos y haz lo que a ti te agrade, cuidando no dañar a los demás. Escucha a la gente que te quiere como tu familia y amigos, ellos toman en cuenta tu bienestar pero aun así las decisiones son tuyas.
4. ¿Calidad o cantidad?
Cuando se trata de amistad es mejor la calidad, a lo largo de los años las amistades falsas se van alejando y si se quedan solo aportan sentimientos negativos que no te dejan avanzar, por eso es bueno dejarlas atrás. Siempre llega el momento en el que debes definir quién vale la pena y quién no, quédate con las personas que te aportan cosas positivas a tu vida, con las que están para ti y tú para ellas.
5. Realización profesional
Si quieres sentirte satisfecha y saber que tienes un motivo, entonces cultiva tu mente. Estudiar una carrera no define tu vida al cien por ciento, pero es bueno elegir una rama que se adapte a tu forma de pensar y a lo que te guste hacer. De esa manera podrás entregar tu tiempo y sentirte feliz cada vez que veas los frutos de tu trabajo.