La felicidad es probablemente lo más anhelado por los humanos a lo largo de la historia. Al soplar las velas del pastel de cumpleaños, comer las uvas de año nuevo o cuando lanzamos una moneda a una fuente, tendremos el mismo pensamiento: “Deseo ser feliz”.
¿Pero ser feliz cómo? ¿Qué tipo de felicidad buscamos cuando pronunciamos en nuestra mente este deseo? ¿La felicidad material en forma de bienestar económico? ¿La felicidad en forma de amor? ¿De más belleza? ¿De más éxito laboral, académico o social? Eso depende de la persona. Todos tenemos diferentes ideas sobre qué es la felicidad y cómo conseguirla. Sin embargo, la mayoría olvidamos que para ser feliz sólo son necesarios esos pequeños detalles que tienen el poder de alegrarnos la vida, incluso sin que nos demos cuenta.