He sido tía la mayor parte de mi vida. Aún recuerdo la primera vez que tomé en brazos a cada uno de mis sobrinos por primera vez, y puedo decir que es una de las mejores experiencias que he vivido.
Una de mis propias tías solía decirme que no hay amor en el mundo como el de una tía por sus sobrinos, y a decir verdad, me parecía que exageraba un poco, pero al paso de los años entendí perfecto lo que trataba de decirme: no hay mejor sensación que estar con ellos y verlos felices. Si eres tía o estás por serlo, seguro te identificarás con lo que leerás a continuación.
1. Son tu más preciado tesoro
Son esos pequeños seres que desde que viste se convirtieron en tus personas favoritas. Son cómplices, amigos y la mejor compañía que puedes tener.
2. Saben que siempre estarás ahí
Cuando tus sobrinos o tus hermanos te pidan ayuda, siempre estarás dispuesta para ayudar en la forma que sea necesario. Amas ser parte de su vida y harás todo lo posible por verles crecer.
3. Eres perfecta a sus ojos
Cuando todo el mundo duda de ti, tus pequeños cómplices jamás dudarán de ti en ningún aspecto. Eres su tía buena onda y te aman como a tú a ellos.
4. Te conviertes en su fan
No hay momento del día en que no pienses en ellos y desees abrazarlos y darles de comer (si aún son pequeños), salir de paseo o dormirlos. No dudarías un momento en llevarlos a vivir contigo.
5. Serán los más honestos
Son los primeros que te dirán si un par de zapatos se ven mal con el outfit que usas, o si no les cae bien la persona con la que sales. No saben de filtros porque quieren verte contenta, y es por ello que serán totalmente honestos todo el tiempo.
6. Te alienta a ser espontánea
Cuando el resto del mundo reacciona arqueando las cejas cada vez que haces algo, ellos son los más felices de que te salgas de la norma y no sigas las reglas para hacer cualquier cosa.
7. Son los más felices de verte
¿Quieres conocer el amor incondicional? Aparece de sorpresa en su casa para que tu corazón salte de alegría cuando veas cómo se lanzan felices a tus brazos. Es lo mejor del mundo.
8. Eres su confidente
Cuando eres tía, te conviertes en la persona más alcahueta que pueda habitar la tierra. No importa si es una mentira piadosa o un problema serio, siempre los respaldarás y saben que los respetas lo suficiente como para no decir nada.
9. Sus triunfos y tristezas son tuyos
Tomas miles de fotografías y disfrutas como nadie las competencias deportivas o el festival de ballet de fin de cursos. Cuando viven algo que los pone tristes también lo resientes y quisieras evitar todo lo que les hace daño.
10. Es un amor para siempre
Desde el momento en que su pequeña mano tomó con firmeza tu pulgar, una parte de tu alma les pertenece para siempre.
