Muchas veces hacemos hasta lo imposible por vernos atractivas ante los demás: utilizamos maquillaje, buscamos los outfits de moda, nos teñimos el cabello e incluso cambiamos nuestra forma de ser y de pensar para encajar.
Sin embargo, ser una mujer atractiva no requiere de tanto sacrificio y dolor. La clave está en sentirte bien contigo misma. Amarte y aceptarte por completo te vuelve más espontánea, amable y feliz, dándote cualidades inimaginables, pues la belleza se proyecta de adentro hacia afuera.
1. Relájate
No te tomes las cosas demasiado en serio, no tienes que ser perfecta para tener relaciones sólidas y amor en la vida. De hecho, al mostrar tus defectos resultas más agradable, pues la gente te ve como alguien más humano y confiable.
2. Haz caso omiso
No prestes atención a críticas, comentarios negativos o desaires; que las cosas se te resbalen como si tuvieras un tobogán en la espalda, ya que caer en la ira o la provocación es desagradable.
3. Sé auténtica
No busques la aprobación de los demás, esto te hace ver como alguien insegura y a nadie le gusta tratar con el tipo de personas que no saben lo que quieren.
4. Ayuda
Sé generosa con las personas que pasan por tu vida, no sabes en qué momento necesitarás de ellos. Apoya, escucha y presta atención.
5. Elije ser feliz
Cuando otros te ven feliz, comienza la envidia y con ello los rumores de pasillo o comentarios absurdos, llevándote a la tristeza de nuevo. En su lugar, elige ser feliz e ignora a este tipo de personas; procura ocuparte haciendo lo que te gusta: leer, escribir, trabajar o ejercitarte.
6. Cuida de ti
Al cuidarte, emanarás una belleza única, pues solo tú tienes el control de tu cuerpo y salud. Aliméntate sanamente, haz ejercicio y atiende tu bienestar emocional.