Existe un tipo de mujeres que son capaces de conseguir la luna si ellas quieren; son esa clase de mujeres que luchan por sus sueños, que cumplen cualquier meta que se proponen, que si desean algo, lo obtienen. Existe un tipo de mujeres que son inteligentes, trabajadoras, luchadoras incansables, que comprenden que no siempre se puede ganar, pero siempre se puede aprender de los errores.
Este tipo de mujeres son conocidas como mágicas porque, a pesar de las tormentas, siempre tienen una sonrisa en el rostro; porque siempre están dispuestas a ayudar a su prójimo; porque aprecian cada gesto… porque descubren que todos los días son un milagro.
Son fuertes, se motivan ellas mismas cada mañana frente al espejo y siempre rompen con los esquemas, no se conforman con nada, saben que el cielo no es el límite, que hay más. Comprenden cuando ha llegado el momento de alejarse y dejar ir. Son tan fuertes que saben perdonar.
Este tipo de mujeres es difícil de amar y no son para cualquier hombre. Para conquistarlas hay que esforzarse, entenderlas, consentirlas, demostrarles que vas a estar a su lado siempre, en cualquier circunstancia, que vale la pena dejar el mundo conocido hasta entonces por estar a su lado.
Debes demostrarle que vas a ser fiel, leal, respetuoso, todo eso que ella se brinda por sí misma, porque ella sabe que no necesita a nadie a su lado, pero eso no significa que no quiera recibir amor, ese amor que ella misma es capaz de ofrecer.
Estas mujeres merecen a alguien que las impulse, que las haga crecer, que se esmere en el trato, que la ame incondicionalmente. ¿Para qué van a perder su tiempo al lado de un hombre sin expectativas, sin sueños, sin ilusiones, que no sabe lo que quiere o hacia dónde va? Ellas necesitan a alguien con quien construir un futuro fuerte, solido, con base en el amor y la confianza.
No se van a complicar la vida con débiles y miedosos. Ellas necesitan a alguien que sepa demostrar sus sentimientos, que les demuestre cuánto las aman y que no se queden solo en palabras sino en hechos contundentes. Ellas saben que no tienen tiempo que perder, no es orgullo, es autorrespeto, dignidad. Este es el tipo de mujeres que un hombre mediocre no puede ni debe tener en la vida, porque no sabrán hacerlas felices y las culparán por su incompetencia.
Si tú eres de este tipo de mujer, no te conformes con alguien que no te merece; sigue tu camino que pronto encontrarás a un hombre que esté a la altura de tus expectativas. Sigue luchando, tú sabes cómo hacerlo.