Muchas veces he escuchado un refrán que dice: “Nadie sabe lo que tiene, hasta que lo pierde”. Aunque es fácil de entender, en realidad comprendes su significado cuando estás pasando por una situación de pérdida, entonces es cuando te das cuenta del valor de lo que perdiste.
Así te sucederá a ti.
Tuvimos una relación maravillosa, no lo puedo negar. Pero tampoco puedo negar que durante el tiempo que estuvimos juntos no me supiste valorar. Puse el mundo a tus pies, busqué mil y un maneras de hacerte sentir el hombre más especial y amado de todos, me esforcé por ser la mujer que estuviera a tu altura, pero nada fue suficiente. Así que hoy decido partir para que te des cuenta de lo que realmente valgo.
Notarás el amor que te tenía cuando recuerdes el brillo de mis ojos y ya no puedas verlos. Querrás volver a tocar mi cabello cuando ya no recuerdes su textura. Vas a querer abrazarme cuando te sientas solo, y entonces te darás cuenta que mis brazos ya no estarán ahí para consolarte. Necesitarás mis palabras y mis miradas cuando estés confundido y entenderás todo lo que significaban para ti. Mi sonrisa te hará falta en los días grises y ni siquiera podrás encontrar mi rostro.
Te darás cuenta del gran amor que teníamos, pero lamentablemente será demasiado tarde. Decidí marcharme porque estabas tan enfocado en ti que me hiciste a un lado.
Te darán ganas de besarme, pero mis labios ya no querrán tocar los tuyos. Querrás tomar mi mano cuando extrañes el calor que te entregaba. Vas a querer abrazarme por las noches y tendrás que conformarte con poner los brazos sobre tu almohada, pues mi cuerpo ya no volverá a estar junto al tuyo. Ya no estaré ahí buscando sentir tu cuerpo cada mañana.
Aprenderás a valorar la razón de mi partida, pues te darás cuenta de la falta que te hago. Vas a desear haber estado a mi lado cuando aún era tiempo, pero ahora yo he tomado mi propio camino y no regresaré la mirada atrás. Sentirás que me amas más cuando ya no puedas decírmelo, ni tampoco me escuches a mi decirte lo mucho que te amaba. Ya no estoy dispuesta a hacerlo ni una vez más. He perdido el coraje y las ganas de decirlo y de luchar por ti.
Querrás estar conmigo, pero mis fuerzas se han agotado. Estoy cansada de esperarte tanto tiempo; ya no tengo ganas de hacerlo. Tú no valoraste mi esfuerzo, y eso me ha dolido demasiado. Y lo peor de todo es que ahora que podrás valorarme, mi amor se ha pagado y me he marchado.