Hombres del mundo, nos hemos enterado de que debajo de todo ese músculo y apariencia fuerte y varonil, son unos tiernos niños que sólo quieren construir fortalezas de almohadas y ver películas de superhéroes en ropa interior.
A veces son un poco molestos, pero pueden proyectar su interior en cosas realmente adorables que a nosotras nos parecen un poco extrañas pero geniales. De hecho, algunas de las más adorables son también las más raras.
(Sabemos que odian que los llamemos ‘adorables’ pero, ¿saben una cosa?, ¡también nos encanta eso!)
1. Cuando eres un poco torpe socialmente
No importa lo que los demás digan: si me preguntas, “¿puedo besarte?”, y te tropiezas un poco con tus palabras, no sólo me resultará adorable, sin duda dejaré que lo hagas.
Por favor, no te preocupes por lograr ser directo cuando me pidas mi número de teléfono, sólo toma mis manos, mírame a los ojos y nerviosamente di algo como: “Por lo tanto, uh, creo que eres, uh, realmente genial, y tal vez podamos, em, no sé, ya sabes: ¿salir algún día?” ¡Esa es la clave para ganar mi corazón!
2. Cuando te descubro mirándome
Frente a un rayo de luz, es aún más lindo. Algunas veces te quedas completamente embobado mientras me miras, hasta el punto de que ni siquiera te das cuenta de que ya descubrí que me estás mirando.
Mientras te tomas un segundo para recuperarte, no puedo dejar de reírme de ti. Es precioso. ¡Hazlo de nuevo!
3. Cuando hablas de un hecho realmente impresionante
La inteligencia es indudablemente sexy, pero cuando es tan evidente, aunque lo hagas parecer de forma accidental, caigo completamente rendida. Odio la pretensión, pero lo que no odio en absoluto es a ti dándome una pequeña lección sobre algún impresionante momento histórico o un reciente descubrimiento científico que yo desconocía.
Además, si es casual que empieces a contar tu historia (énfasis en que “odiamos la pretensión”), hace que seas aún más sexy.
4. Cuando actúas un poco geek con algunas cosas
¿Acaso soy la única persona a la que le resulta absolutamente adorable cuando un hombre se obsesiona con algo un poco raro? Lo único que demuestra es que tiene pasión sin pedirse disculpas a sí mismo, y eso es algo de lo que nunca tendré suficiente.
Es aún más lindo cuando hablas mucho acerca de eso, y me dejas hacer preguntas al respecto. Lo disfruto aunque para mí no sea tan interesante; quiero saber todo, incluso los detalles, aunque a veces no les encuentre el sentido. Puedes verte realmente geek, pero te sientes demasiado tímido para serlo.
La forma en que tus ojos se iluminan cuando hablas de lo que tanto te gusta es, sin duda, la mejor cosa en el mundo. “Entonces, ¡¿qué pasa después en ese cómic de Linterna Verde? ¡¿Él muere?!”
5. Cuando sostienes a un bebé
Esto es más grande que cualquier otra cosa, porque según lo que la sociedad nos ha dicho y los estereotipos masculinos y femeninos, es una pequeña visión de lo que quiero en un futuro. Nada me hace pensar más en: “quiero tener un bebé”, que verte a ti sosteniendo uno.
Cuando un bebé es arrullado con tus grandes manos de hombre, simplemente me vuelvo loca. Claro, de una forma menos espeluznante y obsesiva de lo que crees (lo prometo): sólo me gusta imaginar qué clase de padre serías (una gran debilidad de nuestro pequeño instinto maternal).
6. Cuando ‘accidentalmente’ flexionas los músculos en una fotografía
No soy tonta, y creeme que puedo saber cuando estás flexionando los músculos en una foto para que se noten, aunque seas sutil. Pero es muy, en verdad, muy lindo cuando intentas aparentar que no lo haces. Incluso, te haré un broma acerca de lo “bueno” que estás, lo que probablemente hará que te flexiones aún más.
En realidad es lindo cuando haces cualquier intento poco obvio por impresionarme. El más obvio es cuando estás tratando de parecer muy fuerte, eso es adorable.
7. Cuando tienes un mejor amigo
Nada es más lindo que un hombre que tiene un mejor amigo y no se avergüenza de contarle al mundo sobre él, sobre todo si ha sido amigo de la misma persona desde hace años. Por lo general es de chicas obsesionarse con una o más mejores amigas, pero si un chico lo hace, es completamente adorable. Eso sólo hará que me den ganas de conocer a tu mejor amigo.
Es especialmente lindo cuando tu mejor amigo se burla de ti de una manera que yo no logro entender, porque generalmente es seguido por una historia un tanto embarazosa sobre tus días en la escuela. Aún así es fantástico y te hace adorable.
8. Cuando te dejas crecer la barba para ocultar tu rostro de niño
Sé que eres inseguro porque no te gusta la forma de tu cara y tu piel es suave, pero eso hace que sea muy lindo cuando tratas de ocultarlas con tu vello facial.
Quieres verte rudo, varonil, y te lo haré saber, pero también me reiré un poco de cómo se ve tu barba, porque, ya sabes, si tu cara es de niño entonces probablemente se vea un poco fuera de lugar. (¡Sólo bromeo!)
9. Cuando no sabes bailar o cantar, pero lo intentas de todos modos
¿Sabes quién es el chico que está en la fiesta pasando el rato en la esquina y se mueve un poco fuera de ritmo con la canción que suena a todo volumen? El que se tambalea en la línea entre ser confiado y sus ganas de salir corriendo del lugar, pero se queda de todos modos.
Es alguien adorable. Quiero decir, claro que jamás me opondría a un tipo que realmente sabe bailar, pero se vuelve agotador mantenerle el ritmo a alguien con mucha energía y experiencia. Así que es mucho más divertido fijarme en ti.
10. Cuando tu humor es no tener humor
Si tu humor es perfectamente seco e inexpresivo, llegarás muy lejos. Dame un buen diálogo y me habrás ganado. Amo una buena broma cursi, porque me encantan las bromas, pero amo aún más que tenga que ponerte atención cuidadosamente para poder entender.
Básicamente, si no puedo definir si estás tratando de ser gracioso o en verdad te estás burlando de mi, estás teniendo éxito.