En la vida existen muchas cosas con las que te puedes conformar: la comida que tiene más calorías, un mal trabajo en una ciudad incorrecta, o tal vez la ropa que está en el estante de ofertas. Lo único con lo que nunca debes conformarte es con el amor.
Hay muchas cosas que puedes tener a medias en la vida, pero el amor no debe ser una de ellas. Entre la infinidad de cosas mediocres y comunes que experimentas día a día, el amor, sin duda, debe desafiarlas todas.
Nunca deberías conformarte con alguien que podría irse y no volver jamás. Ni mucho menos con alguien que no valora lo que está sosteniendo al tomar tus manos, o que no te recuerde cada día lo importante que eres para él.
Lo que realmente te mereces es, bueno, TODO. Tú mereces a una persona que te extrañe apenas salgas por la puerta, incluso si sólo te has ido por un momento.
Alguien que no crea en cuentos de hadas, sino que te trate como a una princesa, simplemente porque eso es lo que eres para él.
Que te desafié en lugar de simplemente rendirse. Que comparta sus pensamientos y sea honesto contigo, porque van a compartir de forma honesta su vida juntos. Y por supuesto, que sepa perdonar y ser feliz, en lugar de buscar siempre tener la razón.
Tú mereces una pasión épica que ni 50 sombras de Grey pudo explicar: una chispa que nunca se apague, unos ojos que sólo recurran a ti y la necesidad de sentir tus caricias cada vez que estás cerca. Mereces una pasión que despierte tu interior y entrelace sus corazones en uno solo.
Mereces sentirte querida, y nunca dudar ni por un momento lo que él siente por ti, ni si él estará contigo en un futuro o no.
Mereces ser festejada en cada cumpleaños, y ser abrazada en los días especiales. El esfuerzo detrás de cualquier regalo, aunque sea una flor que recogió en el camino a casa.
Te mereces un pensamiento detrás de cada palabra. Cartas, notas y post-its que te recuerden lo especial que eres para él.
Mereces ese beso estremecedor que rompe todos los límites y te hace perderte en cada momento; que hace que tu mente no pueda ver la diferencia entre presente, pasado y futuro, porque en ese momento, el tiempo no existe.
Mereces algo que no es fácil: un amor que es difícil pero que a la vez es resistente, y se da cuando deciden luchar juntos sus batallas.
Tener un amor verdadero y épico, nada menos que eso. Ser el sueño de alguien hecho realidad. Caminar en el aire y sobre fuego al mismo tiempo, porque las mejores cosas de la vida no son fáciles.
Sí, te lo mereces todo, pero esa persona que está ahí afuera esperando por ti, también.
Tú misma debes justificar el amor que crees merecer. Así que, sé la persona que se merece el mundo, y el mundo te traerá ese amor.