Debido a los avances en medicina, ahora los problemas de fertilidad y de reproducción se han reducido muchísimo. Actualmente, las parejas pueden tener la oportunidad de sostener a un bebé en sus brazos porque se someten a diferentes métodos, como el llamado “Tres padres”.
Camila Rossello y Cristian Destefano son una pareja que desde que se casaron tuvieron muchos problemas para concebir, pero con este popular método se convirtieron en padres y también en los primeros en Latinoamérica en utilizarlo. Ellos abrieron la puerta para otras parejas.
¿Qué es el método “Tres padres”?
Esta es una técnica que recibe el nombre de “transferencia de huso”. De acuerdo con el doctor Ariel Ahumada, quien fue el primero en realizar este novedoso método en Sudamérica:
Consiste en tomar el óvulo o el ovocito de una mujer joven, de una donante, y a ese ovocito se le extrae material genético que tiene y se le remplaza por el material genético de la paciente que va a hacer el procedimiento. Así, se obtiene un ovocito reconstruido que tiene toda la maquinaria metabólica del ovocito joven y el ADN de la paciente.
Este método recibe el popular nombre de “tres padres” porque se concibe a través de tres personas diferentes, aunque los especialistas ya están rechazando este término, argumentando que los niños no tienen el ADN nuclear de la donante del óvulo, sino del ADN mitocondrial.
Camila Rossello y Cristian Destefano ya habían agotado sus posibilidades para tener un hijo
La pareja de San Antonio de Pauda, en Argentina, ya había agotado todas sus posibilidades para ser padres y estaban resignados, pero cuando escucharon del método, quisieron intentarlo como un último recurso.
Siempre supe que quería ser madre. Empezamos a buscar hace siete años, cuando yo tenía 24. Dos años después, llegamos a una clínica de fertilidad y probamos dos tratamientos que no dieron resultado.
Este nuevo método me dio esperanza. Lo hablamos con Christian y decidimos probar.
Le dieron la bienvenida a una hermosa bebé
Camila y Cristian le dieron la bienvenida a una hermosa niña a la que llamaron Giovanna y que nació por cesárea, pesando poco más de tres kilos.
Llevarla en mi vientre, sentir sus movimientos dentro mío fue un sueño hecho realidad.
En cuanto al equipo médico, Camila se siente muy agradecida por cómo la trataron y por ayudarla con su sueño de tener un bebé, en especial al obstetra Aníbal Dal Verme.
Él siempre me dio mucha paz. M e acuerdo la primera vez que fui a su consultorio, le entregué todos los estudios, lo miré y le dije: ‘Este es el asunto, ¿cómo lo llevamos?’.
Este es el tercer nacimiento con este método en el mundo. Los dos anteriores se dieron en México asistidos por médicos estadounidenses, pero que se diera en Argentina lo coloca en la vanguardia e incluso ha hecho que el Ministerio de Salud en ese país esté pensando en integrarlo a su plan estatal de salud y tratamientos.