Sobrellevar una ruptura amorosa es muy complicado y mientras estás en la etapa de negación, a veces tratas de obtener la atención de tu ex por diferentes motivos: porque aún te aferras a la esperanza de que vuelva a tu lado y crees que todo tiene solución, porque te da miedo verlo con alguien más o simplemente porque crees que aún sigues enamorada.
Sea cual sea la razón, si una relación terminó es casi imposible que vuelva a funcionar, así que no retrases tu proceso de curación: Lo mejor es alejarte de tu ex y cortar cualquier comunicación que tengas con él. Si aún no estás segura de que sea lo mejor, estas son cuatro razones por las que no deberías mantener contacto con él.
1. No puedes sanar
Terminar una relación es difícil y muy doloroso, sin embargo, el dolor no es para siempre. Los primeros días te sentirás triste, ansiosa, enojada, decepcionada; sentirás un dolor en el pecho que no se calma con nada y hasta llegarás a pensar que nunca podrás superarlo, y que es parecido a estar en un callejón sin salida. Estos sentimientos son normales y forman parte del proceso de recuperación. Con el paso del tiempo, y si pones de tu parte, llegará la aceptación y verás cómo el dolor va disminuyendo. Entenderás que las cosas pasan por algo y aprenderás a agradecer todo lo que viviste con él.
Seguir en contacto con tu ex retrasa el proceso hacia la superación. Tal vez, al tener noticias suyas, tus emociones se calman y te sientes estable, pero ten en claro algo: ya terminó. Enfrentar tus sentimientos y aceptar que ya no está ahí para ti es el primer paso hacia la superación. No te rindas, sigue adelante y cuando menos lo esperes, ni siquiera aparecerá en tus pensamientos.
2. Gastas energía
Quizá no seas cociente de esto pero, al tener contacto con tu ex, tus energías internas se desgastan. Estas desperdiciando tu energía en una relación que ya no funcionó. Cada vez que sabes de él, que idealizas el momento en que volverán o cualquier tema relacionado con su persona, tu energía positiva se agota. La próxima vez que quieras ponerte en contacto con él, piénsalo mejor. Esa energía puedes invertirla en algo que realmente valga la pena para ti.
4. Te ilusionas con algo que ya no será
Es como vivir en una fantasía. Tu relación ya terminó; no funcionó y nunca lo hará. Seguir en contacto con tu ex significa que aún no has entendido que no hay vuelta atrás, y crees que existe la posibilidad de que en algún momento de la vida, volverán a estar juntos. Cuando sabes de él te sientes feliz, pero cuando la realidad cae sobre ti y te das cuenta de que ya no están juntos, la decepción te aplasta como una ola gigante.
4. Revives los errores
Finalizar una relación debe verse como una oportunidad para crecer, aprender de tus errores, saber qué es lo que quieres y esperas de tu pareja, y qué es lo que jamás volverías a permitir. Sin embargo, cuando te aferras a seguir en contacto con tu ex, estás desaprovechando la oportunidad de crecimiento. Vuelves a vivir la angustia de no saber qué pasará y repites los patrones que te hicieron terminar la relación. Es como un círculo vicioso del que no puedes escapar. Una vez que decides soltar completamente y continuar tu vida lejos de él, obtienes una libertad completa; comienzas a vivir plenamente, sin heridas ni lamentos del pasado.