La infancia es una de las etapas más bonitas que puede vivir cualquier ser humano, esa época en la que nada te importa más que divertirte con tus amigos.
Por desgracia, creces y vas perdiendo la capacidad de asombro por lo que te rodea, y empiezas a ocuparte y a preocuparte por situaciones de adultos y dejas atrás recuerdos de tu infancia que ahorita que los leas vas a sentir nostalgia. Estas son algunas de las memorias más hermosas que vivimos cuando somos pequeños y que no deberíamos olvidar nunca.
1. Divertirnos todo el día
Cuando éramos niños sólo nos preocupábamos por inventar juegos, ver las caricaturas, ir al parque o las maquinitas de la esquina.
2. Comer como si no hubiera mañana
No nos preocupaba eso de engordar, comíamos todo lo que se ponía a nuestro alcance.
3. Ser la reina del hogar
Teníamos todo a nuestra disposición, ropa limpia, alimentos, ‘domingos’ y todos esos lujos que nos daban nuestros papás por ser los consentidos de la casa.
4. Vacaciones pagadas
No nos teníamos que preocupar por nada, sólo de no quemarnos bajo el sol, ahora hay que trabajar y ahorrar para poder irnos de fin de semana.
5. La tecnología
Antes nos entreteníamos con un Tamagotchi o un Tetris, lo más avanzado de hace tiempo, ahora todo son Tablets y Smartphones.
6. Guerras con globos
El verano se disfrutaba con globos llenos de agua y hacíamos guerras entre los vecinos de la cuadra o los primos de la familia.
7. Armar colecciones
Había de todo y para todos, tarjetas de caricaturas, de deportes, de animales y hasta cualquier figura que pudiera ser parte de alguna promoción de compañías de papas fritas, de dulces o de refrescos.
8. Rodillas raspadas
Jugar por horas y llegar a casa con las rodillas raspadas, el pantalón rasgado y solo recibir un “sana, sana” para retomar las andanzas al siguiente día.